sábado, 14 de diciembre de 2019

Matilde D'Errico: L'AMORE CRIMINALE

Me lo compré, de segunda mano, en Italia.
Matilde D'Errico dirige en Italia un programa de televisión centrado en la biografía y las circunstancias del crimen de mujeres víctimas de violencia de género, ya sea a manos de sus parejas o familiares de sangre. L'amore criminale es una selección de la historia de diversas mujeres a las que ha dedicado el programa homónimo.

¿Cómo está el tema de la violencia machista en Italia? En la primera página queda bastante claro: en 2007, que es el año en que comienza la andadura del proyecto devenido programa televisivo, la primera causa de muerte entre mujeres de 17 y 45 años es a manos de un hombre.

La autora nos cuenta la historia de 10 mujeres, la mayoría de ellas muertas por su pareja o familiares. El texto es siempre conmovedor, D'Errico se ha exprimido al máximo para que la lectura de su libro movilice y haga tomar partido.

Y está bien. Si algo sabemos de los fachas, es que el pensamiento estratégico les funciona a mil por hora. Es decir, basta que una sola mujer mate a su marido o que le plante una denuncia falsa, para que sus voceros mediáticos lo difundan hasta el hartazgo y justificar los ataques contra quienes dedican su vida a frenar la lacra de la violencia de género. Cuando, verbi gratia Las Provincias, publican como quien revienta de felicidad que una mujer ha asesinado a su marido, los bares se ponen a vibrar al unísono de indignación y revancha. Por eso los libros como D'Errico dan en el clavo y son necesarios, porque van directos al corazón y obligan a posicionarse del lado de los buenos.

Las mujeres biografiadas no son personas mediocres o marginales. Al contrario, se las conoce radiantes de iniciativa y valor. Se podrá discutir si es realmente necesario o aceptable el empeño con en el que la autora presenta a las víctimas como mujeres maravillosas (que seguramente lo fueron todas las biografiadas, de más está aclararlo), pero lo cierto es que uno no puede más que sentir el golpe de la degradación a la que se ha sometido al mundo al segarles la vida. Las mujeres lo pierden todo, pero el resto de nosotros quedamos peores y más desolados.

¿Qué puedo decir del morbo del espectador? Berlusconi ensucia todo lo que toca, la televisión italiana se me antoja tocada y hundida, las mujeres a las que dedica sus páginas este libro siempre eran bellísimas, y eso que está ahí no puede dejar indiferente a nadie. Pero tampoco soy un experto de la cultura italiana contemporánea, aparte de que aún no he visto ningún capítulo del programa, por lo que no ahondo más en el tema.

Libro muy recomendable.


  

jueves, 12 de diciembre de 2019

Massimo Carlotto: IL MONDO NON MI DEVE NULLA

Me lo compré en Amazon.
Il mondo non mi deve nulla es una novela del escritor italiano contemporáneo Massimo Carlotto. No es el primer libro que leo de este autor. Ya había leído hace un tiempo Niente più, niente al mondo, y alguno más.

Esta novela, como aquélla, es un artificio pensado para ser adaptado al cine o el teatro. Los protagonistas son dos, un hombre y una mujer, y sus parlamentos a actores de los que se comen el escenario les quedarían como un traje. De hecho, es la única alternativa posible, para representarlos, que los actores sean muy carismáticos y fascinantes.

Vaya por delante que el libro no me ha gustado. Se lee rápido y bien, eso sí, o sea, si uno es un estudiante de italiano, estupendo, éste es una forma de libro perfecto para la ocasión. Pero como lector, no estoy de acuerdo.

El tipo es un ladrón de poca monta, un extrabajador de una fábrica que ha perdido el trabajo y roba. Está casado con una mujer que, se infiere, lo tiraniza.

La mujer protagonista (que no es su esposa), es una señora con clase bastante mayor, que ha trabajado de croupier toda su vida, ha juntado dinero, pero no lo suficiente, y ahí está el problema.

Carlotto nos muestra ampliamente los pensamientos del protagonista. Un tipo bastante simple, buena gente que hace cosas malas. Sus monólogos interiores son los absolutamente inmaduros. Pero su inmadurez, a diferencia de lo que pasa en el mundo real, no está acompañada de cinismo, sino de candidez. No vaya a ser que no empaticemos con él.

El protagonista es un absoluto imbécil, y es un imbécil por la monolítica candidez que le imprime su creador. Y a mí, si me preguntan, lo veo yo como una insalvable falta de respeto hacia su personaje y sus lectores. Eso lo suelen hacer los autores de libritos para niños y adolescentes, eso de mostrar los pensamientos malotes y cándidos a un tiempo de sus personajes, pero también lo hacen los escritores para adultos. Vaya si lo hacen. Carlotto es un ejemplo.

¿Y qué decir de los roles que asigna a sus personajes masculinos y femeninos? En fin, no quiero ahondar en ello, porque se me antoja que son una trampa para generar debate, es decir, publicidad. Vaya por delante que el único cándido e inocente es el tipo, y las mujeres son oscuras. En fin. Piedras en las que tropezar, si me preguntan.

Parece que no lo han traducido al castellano. Hay, sin embargo, traducción al catalán.

viernes, 6 de diciembre de 2019

Giorgio Agamben: CHE CHOS'È UN DISPOSITIVO?

Éste también me lo compré por Amazon.
Aunque parezca mentira,
y sabe Dios que sin que sirva de precedente,
a un precio ridículamente barato.


Che cos'è un dispositivo? es el segundo librito de Agamben que he comprado. Y digo librito, porque mi edición tiene unas 40 páginas impresas en tamaño DIN A5678.

Agamben es un filósofo italiano contemporáneo, lo poco que voy leyendo de él me parece inspirador, cosas que te disparan la reflexión. En este trabajo, Agamben parte de Foucault para poner el foco en el funcionamiento de la sociedad moderna. Los "dispositivos", pues, son redes de dominación, en tanto instrumentos, que la humanidad se dio a si misma desde el momento que inventó el lenguaje, y así hasta hoy. Es decir, una cosa que las personas inventaron para dominarse primero, y después para dominar a los demás.

¿Qué trae consigo el dispositivo? Nosotros, usted y yo, formamos parte del "cuerpo social más dócil e imbécil sumiso que jamás se haya dado en la historia de la humanidad". Y a pesar de ello, el poder no nos dejará en paz, porque sigue cagado. Estamos jodidos, entonces, porque si algo aprendí alguna vez de ver el miedo en los ojos de alguien en cuya mano está reventarme de un tiro, es que el que verdaderamente el que tenía que tener miedo era yo, y no él. En fin.

Yo veo bastante Nietzsche revoloteando por ahí, en este libro. Esa desconfianza de origen sobre el lenguaje, me parece a mí, es Nietzsche en estado puro. Entonces me hace desconfiar, porque la desonfianza de Nietzsche siempre está cargada de mala leche, malas intenciones y ganas de joder, es decir, que ensucia todo lo que toca.

Me gustó más Che cos'è il contemporaneo?, de la misma colección.






domingo, 1 de diciembre de 2019

Giorgio Agamben: CHE COS'È IL CONTEMPORANEO?

Me lo compré en Amazon.
Tres euros sin gastos de envío.
Desde Italia.
Están locos estos romanos.

Giorgio Agamben es un filósofo italiano contemporáneo muy importante, un tipo dedicado al estudio de la aplicación del poder en las sociedades contemporáneas. Yo tuve noticia de él a través de las lecciones poderosas y llenas de generosidad de Jaume Peris Blanes, mientras cursaba un Master en la Universitat de València.

Che cos'è il contemporaneo? es, como se indica paratexto mediante, un texto originado en la lección inaugural de un curso de Filosofía impartido el curso 2006-2007 en Venecia. Se lee en poquitos minutos, son apenas 22 páginas en mi edición de nottetempo impresa en DIN A5487, como quien dice.

Ninguna queja. Lo bueno, si breve, dos veces bueno, y este ensayo es al menos cuarenta veces bueno. Leer a Agamben es una fiesta que te deja sin aire, a veces por el desaliento, otras, por esa belleza que te corta la respiración, como Ricky mirando bolsa.

Agamben escribe cosas como: 


Il poeta —il contemporaneo—, deve tener fisso lo sguardo nel suo tempo. Ma che cosa vede chi vede il suo tempo, il sorriso demente del suo secolo? (...) contemporaneo è colui che tiene fisso lo sguardo nel suo tempo, per percepirne non le luci, ma il buio.


(El poeta —el contemporáneo— debe tener fija la mirada en su tiempo. ¿Pero qué cosa ve quien ve su tiempo, la sonrisa demente de su siglo? Quisiera a este punto proponerles una segunda definición de la contemporaneidad: contemporáneo es aquel que tiene fija la mirada en su tiempo, para percibir no las luces, sino la oscuridad. Todos los tiempos son, para quien lleva a cabo la contemporaneidad, oscuros).


Percepire nel buio del presente questa luce che cerca di raggiungerci e non può farlo, questo significa essere contemporanei.


(Percibir en la oscuridad del presente esta luz que busca alcanzarnos y no puede hacerlo, ello significa ser contemporáneos. Por ello los contemporáneos son raros. Y por ello ser contemporáneos es, sobre todo, una cuestión de coraje: porque significa ser capaces no sólo de tener fija la mirada en la oscuridad de la época, sino también percibir en aquella oscuridad una luz que, directa hacia nosotros, se aleja infinitamente de nosotros. Es decir, aun: ser puntuales en una cita a la que se puede solo faltar).

(...) solo chi percepisce nel più moderno e recente gli indici e le segnature dell'arcaico può esserene contemporaneo.

sólo quien percibe en lo más moderno y reciente los indicios y las marcas de lo arcaico puede serle contemporáneo.

Acaba diciendo, Agamben, que el contemporáneo es capaz de "responder a las tinieblas de la hora". Y sí, te dispara la reflexión, Agamben, porque te interpela. Te pone frente a una tarea imposible, y realizarla es condición indispensable para estar vivo. 

Tengo que seguir leyendo a Agamben. Y releyéndolo.

domingo, 17 de noviembre de 2019

Pere calders: CRÒNIQUES DE LA VERITAT OCULTA

Creo que me lo encontré,
hace muchos años, en una casa
de empeños de Valencia.
Cròniques de la veritat oculta (1955, premio Víctor Català del año anterior), es un libro de cuentos y relatos que Pere Calders publicó durante su exilio mexicano. Un desopilante libro de cuentos, si me preguntan, de esos que, en leyéndolo, te hacen ridere da solo como uno scemo mientras viajás en metro.

¿Cuánto hacía que no leía un libro de cuentos? Creo que bastante. Agarré éste por un tema de economía, necesitaba seguir leyendo cosas en catalán para mi preparación del C2 de la JQCV, y quería poder empezar y acabar algo cada vez que me sentara a leerlo. Un libro de cuentos, además, me parecía más certero que un poemario, habida cuenta de que la que se me venía encima era la parte escrita, para la cual no me interesaba empaparme en fiorituras, sinónimos e hipérbatons (si a Machado le pareció bien, por mí estupendo).

O sea. Los cuentos funcionan. Los remates, a veces, se quedan en agua de borrajas, y eso es perdonable si uno hace un esfuerzo por convencerse a uno mismo que acaba de leer un relato en vez de un cuento, pero bueno, así están las cosas. Son cuentos relatos que ganan por puntos, no por KO. El dominio de la lengua es exquisito, y la comicidad es un regalo para la vista.

Ahora bien, dejando de lado todo eso del placer del texto, uno está leyendo un libro editado en 1955, es decir, un período durísimo de la posguerra de exterminio franquista. Y en los cuentos hay no pocas veces que el autor se ríe, y de una forma que te la voglio dire, de los conflictos sociales, casi casi como si fuera un realista posmoderno de esos. Complicado, ¿verdad? Y cómo puede reírse de estas cosas escribiendo cuando escribe y siendo de donde es, nos preguntamos a punto de sacar colmillos y dientes. Entonces nos fijamos, y resulta que el tipo peleó para el bando decente (el republicano) durante la Guerra Civil, y tuvo que exiliarse en México porque en España gobernaban los cerdos franquistas. Muy complicado. Muy complicado de leer y de pensar, este cóctel. Pero si el tipo se jugó las pelotas contra los franquistas de mierda, un respeto, sus razones habrá tenido para reírse de lo que se reía, que lo juzgue otro si le da el cuero. Yo no indago más.

martes, 12 de noviembre de 2019

Gabriel Bibiloni: LLENGUA ESTÀNDARD I VARIACIÓ LINGÜÍSTICA

No sé si me lo encontré en un rastro
o lo regalaban en una biblioteca
Llengua estàndard i variació lingüística es un pequeño manual de sociolingüística editado por 3i4. El autor, Gabriel Bibiloni, es un lingüista que enseña actualmente en la Universitat de les Illes Balears.

Es un librito cortito, algo más de 150 páginas, y no es el primero que leo sobre el tema, que me interesa.

Por razones obvias, la sociolingüística es un campo sobre el cual siempre hay investigación en el ámbito académico catalán. Este manual se me antoja de los más firmemente militantes que he leído sobre el tema, pero no me ha parecido que lo fuera en detrimento de la rigurosidad. Lo que sí, un dato que me chirrió mucho fue que el autor sostiene como una anomalía del catalán que haya diversas ediciones para Cataluña o la Comunitat Valenciana de textos en catalán, y lo señala al menos dos veces como hecho reseñable y único, cuando es bastante sabido que desde siempre las editoriales españolas han producido traducciones adaptadas a un dizque "español latinoamericano" neutro, por un lado, y para el mercado interno por otro. En fin, llamativo.

El manual cumple su propósito de dar un vistazo general de lo que es la sociolingüística a un lector como yo, interesado en el tema pero no especialista. En ese sentido, lectura recomendable. A mí me vino estupendamente en mi preparación del C2 de la JQCV, dicho sea de paso.

   

viernes, 1 de noviembre de 2019

Joan Enric Pellicer: GUIA ESSENCIAL DE LA LLENGUA

Bastante barato me salió. Usado, claro está.
Hace un tiempo me encontré en una casa de empeños de València dos pequeños ejemplares de preparación de pruebas de catalán editados por Adonay: éste que me ocupa, y uno de locuciones (que apenas he hojeado). Como estaba preparando el C2 de valenciano de la JQCV, me los compré (en honor a la verdad, aunque no hubiera estado haciéndolo también los hubiera comprado).

La Guia essencial de la llengua está plagado de cosas como:


Y sí. Erratas de las que hacen sangrar los ojos. Un texto editado por la Universitat de València, por filólogos y para estudiantes de lengua. Aquí se acabó la reseña, obviamente.

domingo, 13 de octubre de 2019

Rafael Casanova: GEOGRAFIA DE LES VEUS

Me lo encontré en una esas mesas
que ponen en algunas bibliotecas para
llevarse libros libremente.
Rafael Casanova es un poeta y profesor de secundaria valenciano con una relativamente amplia y multipremiada obra publicada en catalán. Nacido en 1966, comienza su carrera literaria en 2002, y hasta hoy.

Poemas muy descriptivos a partir de la introspección, los de Geografia de les veus. Con mucha cosa de esas que les encantan a los que estudian letras —mucha "palabra", mucha "voz", mucha "mirada", mucha "piel", algo de "texto" y de "geografía"—. O sea, a quien le guste todo eso, seguramente le gustará este libro. Y las cosas como que las miradas oyen o son oídas o que el cielo suena o escucha, porque pasa todo el tiempo. Lo que sí que puedo decir, con bastante seguridad, es que a pesar de que son poemas muy descriptivos, esa mirada hacia afuera del poeta en realidad está hacia adentro. El mundo exterior y describirlo es, en realidad, una excusa para mirarse, sentirse y pensarse, el único foco de interés que domina la obra.

Para gustos, colores. Éste no es el tipo de poemario que más me gusta.

viernes, 13 de septiembre de 2019

Ferran Torrent: OMBRES EN LA NIT

Yo tengo la edición de Bromera.
Acabo de terminar de releer OMBRES EN LA NIT, de Ferran Torrent. El libro tiene 200 páginas y, en mi opinión, debería tener unas 400. Hay infinidad de cosas que se resuelven en un santiamén, y otras por fuera de lo narrado, y no me acaba de convencer.

La premisa pinta bien: nos cuenta la historia de una célula del Nakam, cuyas andanzas comienzan en Viena, básicamente, y acaban en València. Nos presentan un abanico de personajes y situaciones a cual más fascinante, y uno se relame. Pero los saltos hacia adelante se suceden, se acaba la novela y uno se queda medio así.


viernes, 30 de agosto de 2019

Autobombo: Ezeiza (EZE) - València (VLC) escala Barajas (MAD)

Hola, gente, qué tal, les dejo un enlace a mi poemario, Ezeiza (EZE) - València (VLC) escala Barajas (MAD). Las obras que la componen van y vienen de Buenos Aires a València, se nutren de mi experiencia como emigrante y de todo lo que dejo, lo que gano y lo que intercambio. En Amazon Kindle Unlimited puede leerse en forma gratuita, y hay un período de 30 días gratuitos para nuevas altas (si después no se quiere comenzar a pagar, hay que darse de baja).


miércoles, 28 de agosto de 2019

Митник Александр (compilador): Парад карикатур

Lo encontré gratis,
en una mesa de libros para
regalar de una biblioteca.
Desfile de caricaturas, compilado por un tal Mitnik Alexander, si el traductor de Google no me miente, es un catálogo de una muestra que, parece ser, se llevó a cabo en Odessa en 1989, según me comentan por ahí y no tengo motivos para dudar de ello.

¿Qué puedo decir de este librito? Está lleno de caricaturas, la mayoría de ellas sin palabras, que algunas son para matarte de risa, reflexionando o no. Ahora parece que los llaman memes, al menos en la Argentina, a las historietas de un solo cuadrito. Quizás haya que llamarlos memes, pero me resisto. Yo cuando veía a Fontanarrosa o a Crist en las contratapas de Clarín, yo no veía memes, así que no sé. En fin. Acá va una muestra:




Para mí, desternillantes.

sábado, 24 de agosto de 2019

Antoine de Saint-Exupéry: PILOT DE GUERRA

¿Dónde me los encontré a éste y Vol de nit?
No sé si fue en Todocolección,
en Iberlibro o en algún rastro.
Creo recordar que me salieron
muy, muy baratos.

Aparte de El Principito, con este que acabo de meterme entre pecho y espalda son tres los libros de Antoine de Saint-Exupéry que tengo leídos, porque hace unos años hice lo propio con Vol de nuit, en una edición también en catalán, de la misma colección (alguien habría de avisar a las buenas gentes de Edicions 62 que ellos mismos publicaron la novela que nos ocupa en esta ocasión).

Vol de nit, la verdad, no me cautivó especialmente. Y eso que la historia sucede en la Argentina. Pilot de guerra me resultó una bastante lograda pieza literaria.

Pilot de guerra cuenta, básicamente, una salida de Exupéry en un vuelo de reconocimiento, en plena Segunda Guerra Mundial. Uno agarra el libro y lo primero que puede preguntarse es cómo va a hacer Exupéry para hacer durar la historia tantas páginas como sean necesarias para que el libro cobre entidad como tal. El recurso al que echa mano Exupéry, intercalar sus impresiones con el relato de la incursión aérea. Filosofa un poco por ahí, cuenta anécdotas relacionadas más y menos estrechamente con la historia principal por allá, y las páginas se van llenando. Y ojo, que en mi opinión lo hace muy bien.

La prosa poética de Exupéry funciona a pleno rendimiento en este libro. Si uno es aficionado a subrayar cosas bonitas, tendrá que sacarle punta al lápiz varias veces, durante su lectura. Vívido y aterrador es el relato del efecto que las temperaturas extremas producen en el avión y en el cuerpo de la tripulación, cuando se vuela a gran altura. Yo me acordaba de La venus mecánica, escrita unos diez años antes, mientras Exupéry me contaba los infinitos contratiempos que los 40 grados bajo cero del exterior se estrellaban contra la máquina que pilotaba, básicamente, la congelación de palancas claves para la maniobrabilidad de la nave o incluso de las ametralladoras. Y la completa, temeraria ineficacia de los esfuerzos humanos a esa altura cuando intentaban solucionar las averías. A mí, si me preguntan, responderé que, quitando al bueno de Jack London, solamente Quentin Tarantino me contó de una manera tan impactante la relación entre el ser humano y el frío. Y es que una imagen vale más que mil palabras, evidentemente.

Hay cierto tono de autoconmiseración en el relato bastante acusado en la primera mitad del libro. Ahí no hay una mano izquierda que no se entera de lo que hace la derecha. Eso está ahí. Y uno puede lidiar con ello juzgando al autor, como cuando señalamos con el dedo en las redes sociales, o recordar que el tipo, finalmente, entregó su vida en uno de esos vuelos, protagonista hasta el último aliento de la "lucha de Occidente contra el nazismo", como él la llamaba. Y qué fácil es pedirle humildad a los demás, ¿no? Y qué fácil es, también, olvidar lo mucho que necesitamos que se compadezcan de nosotros los familiares, amigos y conocidos cuando nos pasan tragedias como pisar mierda de perro, y la necesidad que tenemos de darle sentido a esa tragedia, y si es en forma de suerte si ese día compramos un billete de lotería, mejor que mejor. Qué menos que un poco de autocompación por parte de un héroe dispuesto al sacrificio, che.

Lo que me queda claro, para concluir, es que Antoine de Saint-Exupéry no es un escritor del cual sólo haga falta leer uno de sus libros. Aunque ese libro haya sido El Principito. Vale la pena ir leyendo su obra a medida que uno se va cruzando con ella.

domingo, 4 de agosto de 2019

Autobombo: CAMINAR SOBRE LAS AGUAS Y OTROS CUENTOS

Cien páginas de cuentos, más o menos, todos escritos, más o menos, en los últimos veinte años. Hay mucho realismo urbano, algo de realismo mágico urbano, y algún cuento cuyo recorte temporal es el siglo XIX. Pero en general son todas historias que transcurren ahora mismo o hace poco, en Buenos Aires o por ahí. Hay algún personaje recurrente, bastante cosa escrita en primera persona y bastante otra cosa en tercera. Cosas de antes de hacer el Máster de estudios hispánicos en la Universitat de València, y cosas de después. Algunas cosas escritas en la Argentina, y otras en España. En fin. Ahí hay todo lo que hay, básicamente, salvo los minicuentos, que me parece que los voy a editar en Amazon próximamente, un rejuntado de los que me publicaron en Buenos Aires cuando trabajé de escrito en El diario de bolsillo, algunos más que me publicaron por ahí y otros todavía inéditos.

viernes, 2 de agosto de 2019

Josep Ramon Aragó: TEMPS DE CIUTAT I ARBRES

Creo que me lo encontré hace un tiempo,
bastante barato,
en la París-Valencia.
Temps de ciutat i arbres es un poemario en catalán editado en 2008 por La Garúa llibres. El autor, un licenciado en Ciencias Ambientales nacido en 1947.

El libro, a pesar de lo que diga el índice, en mi opinión está articulado en dos secciones más o menos claras y antagónicas: el tiempo de los árboles, que va primero, y el de la ciudad, que va después. La primera sección, pues, está bastante monopolizada por árboles de toda condición, con sus respectivos nombres. Entre éstos, destaca el poema Vern (aliso, en castellano: el gusto es mío), el cual el autor dedica a su propia ignorancia (36):

A internet no puc trobar tot el que cerco,
i menys la web on pugui observar l'arbre
altra vegada, per garantir-ne el nom.

Y aquí comienza a dar una clave de una actitud vital candorosa, el poeta, y que no me desagrada. Pero tampoco le falta autoconciencia y sentido del ridículo, lo que me queda claro cuando leo El mite de la caverna, ampliat (45-46):

Algun grec clàssic graciós podria dir
que hem sortit de la caverna per anar a obrir la capsa de Pandora.
 
Però un altre filòsof també podria apuntar
que, a nous temps, calen noves paraules.
Qualsevol cosa menys allò de "no sé res", i fer-se el Sòcrates.
Y sí, a mí se me ponen a funcionar juntos estos dos poemas.

Si tengo que hablar de gustos, tengo que decir que toda la parte de los árboles se me hizo muy tediosa. Para hablar de árboles, nadie como don Bárbol, y cualquier otro me suena a poco. Pero es una cuestión de gustos, reitero.

La parte de la ciudad se me hizo más sustanciosa y cercana. Es lo que tiene ser un psicobolche posmoderno sobrevenido generación X, que si me tocan la fibra íntima, me gusta. Y me gustó especialmente el poema dedicado Als morts i mortes per brutals repressions (81):

Marcus Crassus va fer crucificar 6000 vençuts.
(De tantes creus, va néixer el cristianisme).
El general romà es va fer molt ric,
però en un descuit va ser capturat. Diuen
que li van fer empassar
or fós.
 
Punt de fusió de l'or: 1064 ºC.

"Qué linda que es la justicia poética, ¿verdad?" podríamos decir si no supiéramos, como sabemos, que cualquier animalada escrita en redes sociales y demás te puede volver como un búmerang después de cualquier tiempo, a joderte la vida así que pasen cinco años. Entonces no lo vamos a decir. Tampoco vamos a decir que, leyendo este poema, nos acordamos del programa ese, 1000 maneras de morir. La gente cuyo deceso nos cuentan en ese programa suelen ser de dos categorías: o bien pobres desgraciados que cometen estupideces sin nombre o tienen la peor de las malas suertes, o effin desgraciados que la palman justo cuanto más los odiamos. Con los primeros el espectador sólo puede sentir lástima o morbo, en cambio con los segundos verlos morir es glorioso (para otros, no para mí, por supuesto). Los primeros suelen ser mujeres que se depilan de prisa y sin medidas higiénicas, gente que toma licor ilegal y se envenena, cosas así, realmente no es divertido. Los segundos suelen ser jefes que están echando una bronca injusta y ofensiva a algún empleado y les da un paro cardíaco, monarcas que están firmando un ducado de Franco, esas cosas. Gente a la que no se puede respetar, básicamente. Porque no lo merecen. Más bien todo lo contrario.

Del poemario me quedé con algunas citas más, subrayadas. Cosas como: "mai he esperat tan fort/com quan era un infant" (85); "penso que la suma de molts grans de sorra/faran una platja" (84); "No hi ha un destí que xucla/des d'un futur. Vents, sí" (90) o los poemas dedicados a la búsqueda de empleo o clientes, que me parecieron, a su manera, encantadores.

miércoles, 24 de julio de 2019

Joe Haldeman: LA GUERRA INTERMINABLE

Ya no lo conservo, aunque debería.
Leí La guerra interminable porque en fin, había aparecido el libro en casa, ni idea de cuándo, cómo ni por qué, y me lo acabé leyendo.

Está bastante bien, la novela. Hacía tiempo que no leía ciencia ficción, con lo que la he querido, y el librito de Haldeman me dio bastante de lo que me gustaba que me dieran en mis tiempos.

El protagonista es un soldado que narra sus periplo guerrero. Como varias veces tiene que hacer enormes viajes, la Humanidad va cambiando mientras él hiberna, y cada vez que despierta todo es diferente, pero lo que se mantiene es la manipulación del gobierno sobre la población en general y los soldados de baja graduación en particular. El enemigo, una raza alienígena que parecía que era malísima y después parece que no lo es tanto. En realidad, los malos acaban siendo los mismos que en Avatar.

Dicen por ahí que La guerra interminable es una respuesta a la mierda esa que escribió Heinlein, Tropas del espacio.

domingo, 21 de julio de 2019

Leonor Moreira: LA MUJER DEL CARTERO

Ahora mismo,
mientras escribo estas líneas,
esta novela se puede conseguir gratis en Amazon.
La mujer del cartero es la ópera prima de una escritora gallega de Galicia, Leonor Moreira. Es una novela en primera persona, bastante sórdida, que cuenta las andanzas de una mujer a punto de recibirse de cuarentona infelizmente casada la cual se enamora de un extraño y apuesto vecino recién llegado y con un oscuro secreto.

La novela está categorizada en Amazon bajo el paraguas de "Romántica" (de hecho, le va estupendamente en la tienda gratuita de la plataforma), pero en realidad no es tal cosa. Lo fundamental de una novela romántica es que la parejita se pelee y se reconcilie sin descanso hasta que se acaba la historia mediante el padre y la madre de todas las reconciliaciones, y esto no pasa en La mujer del cartero. Respeta algunos clishés del género, pero de ahí no pasa. Supongo que el etiquetado se deba a una decisión comercial, para darle fluidez a su difusión, algo que no me parece ni bien ni mal, o sea que me parece perfecto. Pero si tengo que categorizarla, la meto en la misma bolsa que a novelas como El arte más íntimo o American Psycho. Sobre todo la primera.

A nivel estilístico aguanta bien la lectura. Se nota que no es la típica novela de Amazon subida a lo bestia sin casi correcciones. Algún sentimiento sentido, incluso aun o colgado en el colgante se ha escapado por ahí, pero el texto está trabajado, y si la novela dura más o menos 300 páginas, da a despiste cada 100 páginas, que sin haber editor de por medio no está nada mal. Aparte, siempre se puede subir un nuevo manuscrito corregido (si lo sabré yo). El mayor problema que le encontré, en realidad, fue el uso de algunas comas. Y todos sabemos que las comas son muy hijas de puta.

Si tengo que señalar algún otro detalle, es que hay algunas incongruencias entre lo que dice la protagonista sobre su familia y amistades en las primeras páginas y lo que dice en las últimas. Hay una cuñada buena y un hermano que después desaparecen, y eso es un problema.

La historia sabe de dónde viene y a dónde va. La protagonista, si al principio comenzaba a despertar nuestra empatía, acaba descubriéndose un ser horrible y peligroso. El protagonista enseña sus cartas desde el principio, prácticamente, y uno lamenta un poco que sea tan claro que él y sólo él era el asesino que aparece en las noticias un poco demasiado pronto y destacado. 

Por estos días estoy releyendo ahora en inglés, gracias a que me lo encontré baratísimo en todocoleccion.net, Aspects of the Novel, de E. M. Forster, y en este sentido no está demasiado bien cuidada la tensión con que nos preguntamos "¿qué pasará después?", mientras leemos La mujer del cartero, algo que Forster consideraba sagrado. Hay algunos paralelismos y escenarios comunes entre el marido de la protagonista y Álex, su amante, que, quizás, podrían haber servido para que no fuera tan claro desde un primer momento que no otro sino Álex era el asesino en serie de las noticias. Pero al final las cosas son como son. 

Lo que no funciona para que la historia avance, entonces, es lo que Abelardo Castillo decía que sobraba, por lo que, salvo que haya una segunda entrega de la historia que bien podría haberla para resolver muchas tensiones que  podrían estar a punto de estallar y podrían hacerlo en una continuación—, realmente no le veo su utilidad narrativa. Cosas como todo lo que pasa en el bar Punto y Seguido, por ejemplo, que a pesar de que es un lugar importantísimo de la historia, acaba sin dar de sí algunas cosas que sí podía darlas, porque era un punto de encuentro del doble triángulo amoroso. Habrá que ver si hay continuación, en todo caso, porque los nudos que quedaron flojos bien lo ameritan, y ahí hay sustancia para ello.

¿Y qué decir de las escenas amorosas? Son pornografía pura y dura, empiezan a tope y parece que se van desinflando mientras avanza la historia, pero se ve que esas cosas pasan cuando un asesino serial se enamora de la que iba a ser su siguiente víctima antes de liquidarla. La misma suerte que tuvo Clarise Starling bien puede tenerla Clara Villamarín, la protagonista que nos ocupa. De todos modos no podemos engañarnos, la caída en el sexo más o menos convencional de los protagonistas es un remanso de calma que precede una tormenta que sucederá después de la palabra Fin, una tormenta cuyas consecuencias sólo pueden imaginarse y que, nuevamente, le da coherencia a la historia. Habrá que seguir leyendo a su autora, porque no ha empezado para nada con mal pie.

miércoles, 3 de julio de 2019

Herbert Marcuse: LA AGRESIVIDAD EN LA SOCIEDAD AVANZADA

Creo que me lo encontré en una librería de Russafa.
De este librito sólo leí el artículo que le da nombre al volumen. Marcuse toma de las fuentes de Freud, al que parece tratar como a un filósofo, para teorizar acerca del funcionamiento de la sociedad capitalista, y que todo giraría en torno al deseo de autodestrucción, que parecería imprescindible e inevitable para que el mundo (capitalista) siga girando. Este deseo de autodestrucción individual sería el que permitiría pues eso, sujetar al sujeto y esas cosas, hacer que viva su estado de alienación como una vida plena.

Está claro que hay que leer a Marcuse y a toda la peña de la escuela de Frankfurt. A veces es más fácil, a veces es más difícil, pero siempre te disparar la reflexión, porque siempre apuntan alto.

sábado, 1 de junio de 2019

Autobombo: MI AMOR

Esta novela la escribí hace unos cuantos años. La presenté a varios concursos pero, wings, nunca me comí una rosca. Al final me decidí a publicarla en Amazon. En esta plataforma se puede leer gratuitamente, comprar en formato digital e incluso de papel. Creo que tiene sus momentos, aunque no sé si es lo que escribiría actualmente, pero on no ni ha no s'hi pot traure. La reseña de Amazon, todo esto:


La novela parece tratar, con un tono elegíaco, de la fugaz aventura amorosa que su narradora ha tenido con una compañera de estudios cuando ambas eran adolescentes. Con el paso de las páginas la historia explota, se ramifica y se vuelve circular en algunos tramos, ya que es puesta en duda por distintos personajes quienes, en un momento, incluso llegan a apropiarse del lugar del narrador. El juego metaficcional se vuelve sistemático, aunque caótico; la novela acaba siendo un texto fundamentalmente antirreferencial. El recorte espaciotemporal es el del Buenos Aires de los ‘90.

Ojalas dos cosas. Que haya quien la lea, que haya quien la recomiende.

miércoles, 1 de mayo de 2019

George Orwell: REBELIÓN EN LA GRANJA y un poco de otras cosas, también

Me lo encontré.
Leer Rebelión en la granja por primera vez y siendo adolescente, así es como hay que hacer la cosa. Es una lectura iniciática, una lectura que te hiere la empatía de la mejor manera, como El acorazado PotemkinFahrenheit 451 o Las uvas de la ira.
Qué se yo dónde me lo encontré.
El que teníamos en Argentina
allá se quedó, cuando nos vinimos.

La novela de Orwell, qué duda cabe, es la historia de una derrota. El ascenso y caída de la Unión Soviética en todo su esplendor. Uno empatiza con los personajes más entrañables y más derrotados. Dicen por ahí que la CIA estaba encantada de que existiera este libro y 1984, pero a saber. There is no alternative llamaron tiempo después a ese tipo de cosas.

1984 es mucho más siniestra, y lo publicó en 1947. No tenia muchos más años que yo cuando escribió estos monumentos clarividentes.

A Orwell hay que leerlo. Hace varios años me metí entre pecho y espalda Noticia de Catalunya y Sin blanca en París y Londres. Muy bien esos dos también, la verdad.

sábado, 20 de abril de 2019

Massimo Carlotto y Marco Videtta: NORDEST

Creo que me lo compré en iberlibro.com.
Muy barato, la verdad.
Nordest es una novela que se lee muy rápido y bien. Relativamente fragmentaria, hay numerosas líneas en blanco que dan respiros aquí y allá, todo el tiempo. El libro es un giallo, es decir, un policial italiano. Cumple con lo que yo ya vengo viendo desde hace un tiempo, y es que a partir de la premisa del crimen, tarde o temprano tenemos que descubrir que el verdadero asesino es la sociedad, el sistema. El crimen tiene su mano ejecutora, pero el asesino suele ser siempre la Mafia + las fuerzas vivas. Al inglés decidieron traducirlo bajo el nombre de Poisonville, que si bien al principio parece bastante vomitivo como título, después hay que reconocerle que permite insertarlo bastante bien en la tradición estadounidense del policial negro. ¿Quién habrá influenciado a quién? ¿Los yanquis a los italianos o los italianos a los yanquis? A saber. De todos modos, y en lo que nos ocupa, parece que todavía no lo tradujeron al castellano. Qué lastima. Yo ya había leído Niente più, niente al mondo, que ése sí que lo tradujeron. 


domingo, 24 de marzo de 2019

Autobombo: PERSONALS

Estuve trabajando un tiempo en este poemario. Lo presenté a algunos concursos, y no pasó nada. Y dudo mucho que vaya a pasar nada, por lo que, sintiéndolo mucho, lo publico en Amazon. Y después gloria.

La imagen de la portada la encontré bastante después de escribir mi librito. Un ángel tocando una pandereta. Apropiado.

Mi librito se puede comprar tanto en papel como en digital. Si lo compran ustedes, muchísimas gracias hasta las lágrimas, qué duda cabe. Y si me ayudan a difundir mi librito, también.
Éstos son dos de los poemas que integran mi librito.
Si hacen click en la imagen lo
van a poder leer sin problemas.

domingo, 10 de marzo de 2019

Carlos Giménez: TODO PARACUELLOS

Me lo regaló un amigo.
Si no recuerdo mal, estas historietas las descubrí siendo un niño en las páginas de Superhum®, de Ediciones de la Urraca. Su autor, Carlos Giménez, fue víctima de la típica práctica de represalia contra los niños que los que a la postre formarían el Partido Popular realizaban con delectación: era un interno de los campos de concentración para niños del Hogar Social, un lugar de tortura, desaparición y muerte con el que la Iglesia española se forraba.

¿Por qué los proto peperos disfrutaban tanto torturando y asesinando niños? Porque había un hijo de puta, el Vallejo Nájera ese, que tenía una teoría por la cual había un dizque gen rojo y los hijos debían pagar por los padres y los padres por los hijos, independientemente de lo que dijera la Biblia. Aparte, era contagioso. Pero no siempre, por lo que las hijas de puta que quisieran, podían quedarse con los hijos de los rojos, que para eso había un entramado legal que lo permitía. Con la complicidad enriquecedora pecuniariamente de la Iglesia, por supuesto. Quien diga que la única iglesia que ilumina es la que arde, se equivoca: el oro manchado de sangre relumbra bien bonito, también.

Las historias unitarias reunidas en Paracuellos son una lectura acongojante. Después, si uno está interesado en informarse, ve que se quedaban cortas, como puede comprobarlo viendo este documental o leyendo esta tesis doctoral, por ejemplo.

Paracuellos es un hito de la historieta en castellano y de la historieta mundial. Si uno es o ha sido un apasionado de ésta, como es mi caso, es una lectura imprescindible. Es de esa clase de obras que uno puede tirarle por la cabeza a cualquiera de esos que emiten el típico comentario desdeñoso, como cuando se hace lo propio con ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? como proyectil inteligente contra desdeñadores de la CF, por ejemplo. No sobran en ninguna biblioteca.

domingo, 3 de marzo de 2019

Françoise Sagan: BONJOUR TRISTESSE (y un poco de CIERTA SONRISA)

Ni idea de dónde me lo encontré.
Me recuerdo a mí mismo leyendo esta novela siendo bastante joven, en un viaje en autobús, olvidándome el libro en el asiento al final del trayecto, lamentándolo mucho. Era un ejemplar de la biblioteca familiar, diferente al que conservo actualmente en la mía. Me la volví a encontrar hace unos años, en algún rastro, y me la traje a casa. Y hace poco, una versión en francés, que es la que estoy leyendo. Era imposible no enamorarse de Cécile, su protagonista, como no dejar de hacer lo propio con las Anna Karenina, las Emma Bovary o, qué joder, las Laura Muntanyola, siendo lector adolescente. Ahora, no sé.

Había sido una lectura apasionante e incrédula. No podía creer que me gustara tanto lo que estaba leyendo. Y, qué duda cabe, eso de que su autora tuviera 18 años al momento de escribirla, envidia negra. En casa me hablaron con cierto desdén de la novela y de su autora, pero el librito ahí estaba, en la biblioteca.

Buenos días, tristeza cuenta distintas historias de amor o de caprichos bastante turbias, de una perversidad volátil y etérea. Voluntades ferreas y leves que chocan, que no necesitan lavar los platos y, por ello, bastante despiadadas y con mucho tiempo para ello. La protagonista es consciente de lo que pasa, a su manera, pero no todo lo expone, se guarda alguna cosa aquí, alguna cosa allá. Está bien construida la novela, y acá la explican bastante bien.

Cécile, qué duda cabe, es una niñata consentida que, al momento de los hechos relatados, gusta o no puede evitar manejar a quienes le rodean a su antojo, utilizarlos de una manera vil, y después asquearse de ellos o de sí misma. El final tremebundo es como un castigo que recibe, que la hace cruzar una línea que es definitiva, y que la destruye. Antes de eso, aún tenía escapatoria, pero la autora le cierra las puertas a la redención. Sólo deja de ella un cadáver atravesado por la culpa.

Éste creo que me lo encontré en un rastro
hace unos años, pero a saber...
Hace unos años intenté leer Cierta sonrisa, y no pude con ella. No sé por qué, pero a mí me pasa con no sé cuántos autores franceses que sólo puedo leer un libro que salga de su pluma. En fin...



domingo, 10 de febrero de 2019

Jeff Kinney: DIARIO DE GREG. UN PRINGAO TOTAL

Es de mi hijo.
Fue un regalo de cumpleaños.
No sé si se lo regalamos nosotros o fue regalo de alguien, creo que lo segundo, pero este libro es de mi hijo desde hace varios años. Ahora, los está leyendo y devorando mi hija, enganchadísima. Suelo leer, al menos, el primer libro de la serie de cosas que le guste leer a mis hijos, y este es el último con el que me he metido.

El Diario de Greg es un El pequeño Nicolás revisitado por un gringo mucho después. El segundo es el que me tocó leer a mí cuando era niño.

El humor de este libro está bien, la escritura es ágil y los dibujos son muy simpáticos. Si mis hijos han estado encantados de leerlos, por mí perfecto.

Hace unos días compré los cinco primeros volúmenes
en inglés a una librería en línea de Inglaterra,
Reino Unido, Gran Bretaña o de por ahí.
Muuuuuuy baratos, la verdad.


De piedra me dejó leer los "morons" y los "sissys"
en un librito de literatura infantojuvenil.
Se ve que me hacen falta toneladas de input de ese,
para no quedarme boquiabierto y babeando a la primera.
Por no mencionar nada de los phrasal verbs, God damn them.



Fácil imaginar el mensajito furtivo sin que la seño se de cuenta.
La taquigrafía primaria y la ortotipografía laxa,
encantadoras, por supuesto.

viernes, 8 de febrero de 2019

John Boyne: The Boy in the Striped Pyjamas

Me lo encontré en un Corte Inglés,
nuevito y coleando.
Muy bien de precio, la verdad.
Me encontré con una edición en inglés de este librito, obra y gracia de Oxford Press, y me lo compré. Tenía pánico de haberme comprado una edición facilitada, y leer una y otra vez que era una unabridged edition realmente no me decía nada hasta hace muy poco, pero bueno, resultó que el texto era integral.

Me parecía sospechosamente inteligible, la verdad. La última experiencia más o menos parecida, así, la había tenido con The Old Man and the Sea, pero el libro del irlandés es todavía más comprensible. O quizás es que he madurado.

Es una lectura que lo expone a uno a variados golpes duros (que no bajos), como no podría ser de otra manera si se escribe acerca del Holocausto. Qué hijos de puta, los alemanes. Cómo disfrutaban torturando niños y esas cosas, los mierdas.

Parece que fue escrito como literatura juvenil, pero a mí que soy cuarentañero también me funciona, la verdad. El narrador cuenta en tercera persona, pero su mirada está bastante mimetizada con la del niño que protagoniza la historia, por lo que en mi opinión está más que justificado el aproximamiento tan indocumentado y dubitativo al horror del Holocausto. El niño no tiene ni idea del horror, y no está en condiciones de creérselo. A medida que avanza la historia, y ya sobre el final, el narrador asume la mirada prácticamente simultánea de los dos niños: de Bruno, el hijo de mandamás de Auschwitz, y de Shmuel, el niño judío con el que entabla una relación de amistad. Y no es casual, nos hemos ido acercando a Shmuel desde hace páginas y páginas, desde que era apenas un punto perdido un poco más acá del horizonte.

El final es tremebundo, como no podía ser de otra manera. La atroz inocencia de los protagonistas, su impenetrable ignorancia, arroja una luz sobre la historia que lo pone todo en foco, porque somos nosotros los lectores los que tenemos que darnos cuenta de lo que pasa, y es inevitable.

Hay quien dice que esta novela obligaría a los padres a tener que explicar a los hijos qué fue la Shoa. Quizás. Lo cual no es un pecado, por otra parte. Todo hay que explicarlo y aprenderlo, porque así funciona ser personas.


lunes, 4 de febrero de 2019

Vicent Andrés Estellés: PRIMERA SOLEDAD


Me lo encontré en Iberlibro.
Muy bien de precio, la verdad.
Este poemario lo leí hace unos años. Hay un ejemplar en la biblioteca del pueblo, lo pedí varias veces, y la verdad es que estaba buscándolo para comprármelo desde hace años. Hay un sinvergüenza flipado cabrón tiparraco librero que lo tiene a la venta desde hace años en Amazon por el increíble precio de 166 euros más gastos de envío, lo cual me condenaba a bucear a través de Iberlibro, eBay, Wallapop y Todocolección infructuosamente, a la búsqueda de mi ejemplar propio y a precio razonable, hasta que finalmente me lo encontré. Mi... tesoro...

Primera soledad es un libro inaudito de Vicent Andrés Estellés, un poemario ¡en castellano! poco tiempo después de la muerte de su hija, apenas nacida. Escrito en 1956 y publicado en 1988, poesía oopartiana de postguerra lanzada al mundo 30 años después, un aporte silenciado y en suspenso. Todo esto lo sabe todo el mundo.

Leer Primera soledad es arduo y asfixia. Es tremendo, un machaque constante de duelo recién reventado, un ostinato de horror y de pena obsesivo y sucio, sin cerrar los ojos ni para pestañear, abriendo la boca sólo para gritar sin jamás tomar aire. No se puede leer Primera soledad en un día cualquiera. Te cambia el estado de ánimo y la forma en que mirás el mundo. No tengo ninguna gana de ponerme a buscar citas para ejemplificar nada, porque este libro no es para leerlo ni con guantes ni con lupa. Hay que tomar aire, darse coraje y zambullirse. Después salir a flote y respirar. La empatía se transforma en un demonio siniestro con el que uno ha bailado como si fuera el Demonio, propiamente...

PD) Hay muchos hijos de puta que disfrutan destrozando la estatua de Estellés en Burjassot. Mal rayo los parta.

martes, 29 de enero de 2019

Natalia Ginzburg: LA STRADA CHE VA IN CITTÀ

Me lo compré cerca de la EOI.
Nuevo.
Carito, la verdad...
La protagonista de esta novela es una mujer rebelde, es decir, acaba castigada. Eso lo sabemos desde que hemos leído Anna Karenina y Madame Bobary, y leer Laia, No una, sino muchas muertes, Nada, Aloma, Laura a la ciutat dels sants, etcétera y ahora La strada che va in città no hace más que recordárnoslo.

Delia, la protagonista, apenas una adolescente, se queda embarazada y se casa con un hombre al que no ama. Mientras tanto hay otro, que nunca queda claro si se aman o no, que queda por el camino. Lo que siente y lo que hace nos lo va soltando de a poco, a veces en medias palabras, y es difícil hacerse una idea de qué es lo que hace y lo que siente esta narradora en primera persona porque ni ella sabe lo que quiere y lo que siente. Está atrapada en un problemón del que consigue salir para meterse en otro, y es como si estuviera sola frente al mundo, que poco menos. La autoestima por los suelos, por supuesto, y muchas ganas de vivir.

La escritura de esta novela corta es ágil, se lee muy bien. Algún detallito humorístico hay aquí y allá, pero siempre desde la risa amarga. Al final cuesta empatizar con la protagonista, y supongo que eso es una lucha que uno puede tener contra sí mismo, es decir, qué difícil que es no ponerse en un pedestal y juzgar a todo el mundo, porque nadie es perfecto y no te gustaría estar en los zapatos de Delia.